viernes, 17 de junio de 2011

Con todas las banderas

Es desolador el panorama de la oposición política.
*Mauricio Macri trajinando los tribunales por las últimas denuncias, recibiendo el repudio de los estudiantes secundarios, denunciado por los peligros fatales que abundan en los edificios escolares de la Ciudad y huyendo de cualquier debate televisivo con Filmus y Tomada, sus principales contrincantes del Frente para la Victoria.
Como el resto de sus colegas de la oposición, Macri sólo sabe refugiarse en la retaguardia estratégica de “TN”.
*Ricardo Alfonsín mostró sus miserias haciendo declaraciones contra el gobierno argentino y contra su propio país ante un diario español conocido por su anti-argentinismo. Eso no lo hace un hombre de bien y mucho menos, alguien que dice ser un candidato presidenciable. Primero la patria, Alfonsín, aunque usted no sea peronista.
*La feria de vanidades pudo más y el Frente de Binner, Pino Solanas y Margarita Stolbizer dejó de ser “amplio y progresista”. Actuaron igual que el “pejota federal”: a la hora de hablar de candidatos, se rompieron. Un bochorno total. De nada valdría si retoman o no en estos días ese tejido roto. El papelón ya está hecho.
La debilidad opositora se acentúa de manera inversamente proporcional a la revalorización de la política.
A todos ellos, en verdad, los deshace la vuelta de la política. Los vuelve locos. Se destemplan. No saben manejarse en esas aguas torrentosas de la pura realidad. Acostumbrados a que el libreto lo pasaban a recoger en un estudio de televisión o en una editorial de La Nación o Clarín, ahora que deben valerse por si mismos, quedaron más desorientados que perro en cancha de bocha.
En las antípodas, la Presidenta afirmó ayer desde Misiones que su gobierno “es más que el más formidable plan de obras públicas, es un proyecto de país que incluye a 40 millones de argentinos".
Cristina inauguró junto al gobernador Closs un Teatro Lírico en Posadas y en simultáneo se comunicó con la ministra de Industria, Débora Giorgi que inauguraba una fábrica de calzado deportivo y con el ministro de educación, Alberto Sileoni, que en San Juan encabezaba junto al gobernador Gioja el acto de apertura de la escuela número 1.116 desde Kirchner a hoy.
La Presidenta también se hizo lugar para cantarle la justa al primer ministro inglés: “…en nombre de todos los argentinos, nunca creímos en los puntos finales de los derechos humanos ni mucho menos de los derechos soberanos”, aseguró Cristina.
Si el pueblo vuelve a cantar y bailar, allí el arte y la lírica.
Si el país vuelve a producir, allí la inauguración de más escuelas técnicas.
Y si el país recuperó su autoestima nacional, allí vamos entonces, con todas las banderas.




El Argentino, viernes 17 de junio de 2011

1 comentario:

Gaita dijo...

Estimado Sr. Jorge Giles: Concuerdo absolutamente con sus ideas expresadas respecto a los oponentes políticos del gobierno encarado por NK y CFK. Como decíamos muchos años atrás quienes vivimos en el centro de Bs. As. y el lechero nos traía la leche suelta a domicilio mientras a medida que iba casa por casa con un sonido bucal hacía avanzar al caballo y al carro desde la vereda de enfrente: estos opositores están "mas desorientados que caballo de lechero que le cambiaron el reparto" Pero la desorientación no debería confundirlos en sus deberes de ciudadanos para con su patria. Son cipayos que - como todo cipayo - se contrata con quien tiene sus intereses contrarios al país que los vió nacer. Y así los recordará la historia, que no podrán reescribir los Mitres, Herreras (nada Nobles) ó Magnettos ya que todo el mundo ha despertado del letargo del discurso mediático corporativo de los poderes mundiales. Un gran abrazo