viernes, 21 de enero de 2011

No es chacota la vida



La distancia que media entre el arte de la política desplegada por la Presidenta y las mañas politiqueras de la oposición, tienen una distancia tan enorme como la que media entre Buenos Aires y Estambul.
No hay forma de acortarlas, por más esfuerzo que haga el Clarín, La Nación y sus repetidoras.
Mientras Cristina culmina su exitosa gira por Kuwait, Qatar y Turquía; mientras ella y los ministros que la acompañan firman convenios de reciprocidad con esos países que redundarán en más y mejor inserción en el mundo para la Argentina; mientras los empresarios que integran la comitiva celebran acuerdos que significarán más empleo y más producción para sus exportaciones, mientras ocurre semejante transformación y expansión de las relaciones diplomáticas, culturales y económicas de nuestro país como nunca antes se había logrado, los opositores van y vienen sobre los médanos de la costa, volando bajito sobre las playas, desparramando sus gastadas recetas de odio y desesperanza en las que ya nadie cree.
Recetas que, además, terminan siendo un boomerang para ellos mismos porque, como bien dijo el canciller Timerman desde Turquía, se perdieron la histórica oportunidad de beneficiarse con esta gira presidencial, como sí lo hicieron los industriales y empresarios grandes, medianos y pequeños, de distintos rubros, que prefieren crecer y construir un país mejor antes que dinamitarlo, como hace la Mesa de Enlace.
A la oposición se le rompieron todos los espejos y para peor, no se reconocen en el espejo grande de un proyecto de país que nos cobije a todos.
No viajaron, pero sin embargo ellos sí que andan perdidos “como turcos en la neblina”.
En el estribo, nos regalamos otro poema del poeta turco Nazim Hikmet, ahora que nuestra Presidenta anda por su tierra:
“No es chacota la vida. La tomarás en serio, como lo hace la ardilla, por ejemplo, sin esperar ayuda ni de aquí ni de allá. Tu más serio quehacer será vivir.
No es chacota la vida.La tomarás en serio, pero en serio a tal punto que, puesto contra un muro, por ejemplo,con las manos atadas, o en un laboratorio, de guardapolvo blanco y con grandes anteojos, tú morirás porque vivan los hombres, aún aquellos hombres cuyo rostro ni siquiera conoces. Y morirás sabiendo, ya sin ninguna duda, que nada es más hermoso, más cierto que la vida. La tomarás en serio, pero en serio a tal punto que a los setenta años, por ejemplo, plantarás olivares, no para que les queden a tus hijos, sino porque, aunque temas a la muerte, ya no creerás en ella, puesto que en tu balanza la vida habrá pesado mucho más”


El Argentino, viernes 21 de enero de 2011

2 comentarios:

Paulina dijo...

Hola

Mi nombre es Paulina y soy administradora de un directorio de webs/blogs. Buen blog personal. Quisiera intercambiar enlaces. Puedo agregar tu pagina en mi directorio para que así mis visitantes puedan visitarla tambien.

Si te interesa, escribeme al mail: paulina.cortez@hotmail.cl

Saludos
Pau

Beatriz Fernández Vila dijo...

Como siempre, la presidenta desplegando inteligencia y belleza por otras latitudes, para satisfacción de los argentinos que amamos este país. Confiados como nunca en tanta capacidad, y esta representatividad que da orgullo, y no vergüenza como en otros momentos aciagos de Argentina.
En cuanto a los ramplones que vuelan bajo para cuidar los mismos intereses de siempre qué podemos hacer. “El ojo del amo engorda el ganado”, dice el refrán, y a estos amos les fue muy bien durante doscientos años, por qué tendrían que entender ahora, que tienen que poner sus codiciosos ojitos en otra parte que no sea la explotación del de abajo y la ganancia desmedida de su casta. No saben qué hacer ante otro escenario, tienen la necesidad imperiosa de profundizar el único que conocen, que manejan muy bien y que les da excelentes ganancias. Aunque si los escuchás, últimamente Llambías parece el ideólogo del grito de Alcorta, y el trajinante sudoroso del surco y el arado. Tan desubicados están en esta Argentina que ya no les calza a medida, que hasta se sueñan revolucionarios luchando contra un régimen despiadado y feroz.
Sigo disfrutando de tus páginas que por suerte subís al blog, porque te sigo en MIRADAS, pero no accedo nunca a EL ARGENTINO. Un fuerte abrazo.
Beatriz