lunes, 27 de diciembre de 2010

La navidad del pueblo



Mi barrio fue una fiesta la noche de Noche Buena.
Había ganas de juntarse entre los vecinos, de saludarse y brindar por el país.
Nadie quiere estar solo en tiempos de cosecha.
El piberío corría por las veredas con sus bengalas, mientras los padres competían inocentemente por el mejor fuego artificial de la cuadra.
“Es la Argentina real” murmuraba por lo bajo para no perturbar a nadie en esa noche tan de todos, cuando advertí el llanto pudoroso de una piba del vecindario.
“Llorá nomás”, le dije sin saber porqué lloraba. Agradeció la compañía de toda mi familia que la abrazaba solidariamente y con voz entrecortada agregó:
“Me duele tanto lo de Néstor Kirchner”.
Y se puso a bailar después, al compás de una musiquita que salía del parlante de un vecino peronista.
No pronunció la palabra “muerte”.
Estaba todo dicho en la Noche Buena.
Ella era la vida abriéndose paso entre los cultores de la tristeza.
El crecimiento económico alcanzado se comprueba por las estadísticas del derecho y el revés, mostrando y demostrando el récord histórico en las ventas navideñas y el agotamiento de pasajes y alojamientos para el prematuro éxodo turístico de los argentinos.
Pero el desarrollo social se demuestra en la cantidad de alimentos, vestimentas y regalos adquiridos por distintas franjas sociales, casi sin excepciones.
Y en esa piba bailando.
La solvencia política del proyecto gobernante aparece más clara si uno se pregunta:
¿Estamos igual, peor o mejor que el año pasado, en términos individuales y colectivos?
¿Este gobierno tiene liderazgo político y social?
¿El movimiento nacional, popular y democrático, está unido en lo estratégico y articulado en lo táctico?
¿La presidenta gobierna y conduce ese movimiento?
¿El gobierno abandonó las grandes líneas de las políticas de Estado que elaboró y gestionó con el presidente Néstor Kirchner y la presidenta Cristina Fernández de Kirchner o reafirmó esas líneas?
¿La oposición de Clarín y sus voceros políticos colaboran con la felicidad del pueblo o la sabotean?
Coincidirá con nosotros en que estamos mejor que antes, que hay un liderazgo popular de Cristina muy claro, que es ella quien conduce y gobierna con una eficiencia sin antecedentes para el sistema democrático, que hay unidad en la diversidad a lo largo y ancho del Frente para la Victoria, que puesto a prueba, se reafirman todas las medidas de seguridad para consolidar la paz y el orden social sin violencia.
Pero no estamos solos, lamentablemente.
Allí están los violentos que titulan, como lo hizo ayer el ex gran diario, promoviendo más ocupaciones, más discriminación, más bajón para la esperanza.
Que siga la fiesta, pero sin bajar la guardia.

El Argentino, lunes 27 de diciembre de 2010

1 comentario:

Beatriz Fernández Vila dijo...

Jorge: te acerco un cálido abrazo en este fin de año tan especial, y a las puertas de un 2011 convulsionado, como el que imaginamos, pero al que enfrentaremos con esperanzas. Gracias por tus páginas a las que acudo siempre para confirmar que hay otro que ve lo que yo veo, que siente lo que yo siento, y que somos muchos más.
Un feliz año nuevo, y mucha alegría, porque el gran compañero que fue el hacedor de este proyecto de nación, hizo todo con alegría. Afectuosamente, Beatriz